Tus puntos débiles en la cama
Cuando estés en la cama, aprovecha para encontrarlos y mejorarlos
Esta es una newsletter que trata sobre movimiento y vida.
Cómo aplicar el movimiento en la vida diaria, y algunas reflexiones que voy haciendo en el camino.
Me ayudaría mucho si te suscribes y compartes lo que estás leyendo. ¡Muchas gracias!
Lo reconozco, lo he hecho adrede, en el título iba una coma y no la he puesto.
La newsletter de hoy no trata sobre los motivos por los que no satisfaces a tu pareja en la cama (eso, en caso de que tengas).
El título correcto sería:
Tus puntos débiles, en la cama
Pero ya ves, me apetecía escribirlo a sí por darle un poco de salseo y de diversión a la vida, que de eso se trata un poco.
En tal caso, lo que quiero contarte igual de forma indirecta sí mejora tus relaciones en la cama así que vamos a ello.
Igual por mi formación de ingeniero o bien por culturilla popular sé/sabemos aquello de que “la energía ni se crea ni se destruye, se transforma”. Te suena ¿no?
Es decir, los cuerpos solo por el hecho de existir tienen energía, y cuando esta energía se transforma, suceden cosas. Sea de forma voluntaria o involuntaria. Las principales transformaciones de la energía son las siguientes: movimiento, calor, sonido.
Las principales transformaciones de la energía son las siguientes: movimiento, luz, calor y sonido.
*no quiero ponerme muy técnico con la nomenclatura y no es objeto de esta newsletter ser específico e ir al detalle, así que si eres de ciencias, no me lo tengas en cuenta.
En concreto hoy quiero hablarte de “el sonido” o “el ruido” que haces cuando te mueves.
En cuanto al movimiento, todos sabemos que el ruido es una señal de ineficiencia (y si no lo sabías, esto sí es falta de culturilla popular). Observa un gato moverse y verás que se mueve de forma fluida y sin apenas hacer ruido. Aún cuando hacen esos saltos en los que se suben a la estantería.
¿Crees que un gato se mueve bien o mal? Creo que la respuesta está clara.
Ya sé lo que estás pensando:
-Pues vaya Carlos, ¿ahora resulta que tengo que hacer el salto del tigre en la cama?
-No, ya te he dicho que (en principio) esto no va de tus relaciones íntimas.
Se asocia el ir a acostarse a un momento en que todo se para, todo está en calma, hay tranquilidad, es momento de reposo… pero sobretodo, hay ausencia de ruido. Y es precisamente esta ausencia de ruido (ambiente) la que va a ser nuestra aliada.
Cuando estés estirado en la cama, si tienes la suerte (o desgracia) de dormir solo, te propongo que hagas pequeños movimientos y observes si hay ruido/sonido. No te pido nada concreto, intuitivamente encontrarás esos movimientos que necesitas trabajar. Puedes mover el brazo, la pierna, mover el abdomen, torsionar la columna, mover el cuello, lo que quieras. Pero suave, nada de movimientos vigorosos.
Estoy seguro que escucharás cositas. Cositas que durante el día no escuchas porque el ruido “ambiente” (por muy bajo que sea) lo camufla.
Observa si los sonidos que oyes son simétricos, es decir, si oyes un sonido al mover el brazo derecho de X forma, ¿sucede lo mismo al mover el izquierdo de la misma forma?
Detectar estos pequeños sonidos, como decíamos antes, es detectar pequeñas ineficiencias. La tarea aquí es intentar moverte de la misma forma, pero haciendo cambios sutiles, inapreciables a la vista, pero sí apreciables en la sensación que producen en tu cuerpo.
Cuando me encuentro haciendo estas cosas a la hora de ir a dormir (llámame friki, o quizá es falta de sueño) a menudo me doy cuenta que es por motivos como los siguientes:
Contengo la respiración, y al soltarla se suaviza el movimiento.
Activo, o estoy tenso, en musculatura de una zona concreta, y al ser consciente de ello y relajarla el movimiento se vuelve más fluido.
No activo la musculatura correspondiente para el movimiento en cuestión. Un mismo movimiento se pueden obtener activando diferentes músculos.
Hay musculatura que no sé como activarla, esto me he dado cuenta recientemente con la parte baja del abdomen. Me es sencillo activar (poner dura) la parte alta, pero la parte baja me cuesta más, y estoy trabajando en ello. Escucha lo que sucede en tu vientre.
Me doy cuenta que en todo el día no he movido cierta parte del cuerpo. Esto me suele suceder con ciertos segmentos de la columna. ¿No os pasa que notáis que en ciertas posiciones os “cruje” la columna?
No hace falta escuchar crujidos o sonidos muy fuertes, de echo el objetivo hoy es escuchar esos sonidos bajitos que suelen costar de escuchar.
Te recomiendo además que intentes hacer movimientos compuestos, por ejemplo, “mover la columna de X forma, mientras el brazo izquierdo está en Y posición”.
Como siempre se trata de tomar consciencia de tu propio cuerpo y lo que sucede en él.
Vives en un cuerpo y eso no lo va a cambiar nada ni nadie, por lo menos por el momento. Así que aprovecha y conócete un poco más, busca esos puntos débiles, esos sonidos, esas pequeñas diferencias y desequilibrios entre un lado y el otro.
Cuanto mejor vivas en tu propio cuerpo, mejor estarás a nivel físico. No porque estar bien a nivel físico sea más importante que estar bien en otras facetas de tu cuerpo/vida, sino porque es una más, y todo suma.
Recuerda, el primer cambio para mejorar o cambiar algo es ser consciente que hay algo que mejorar.
Acuérdate de mí hoy cuando vayas a dormir.
¡Que tengas un feliz día!